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Solidaridad internacional

Por el bienestar de la sociedad.

Trabajar para el bienestar de las generaciones futuras, sin haber resuelto los problemas del presente pareciera descabellado. No obstante, si lo hiciéramos, ocurriría un efecto virtuoso, en donde actuar ahora pensando en el bienestar de nuestros hijos, nietos, bisnietos … haría de nuestro mundo un mejor lugar para vivir.

Para ello se requiere de la intervención estatal decidida en la defensa de la dignidad, los derechos humanos, la paz, la naturaleza y el desarrollo sostenible; el estado somos todos, hecho que nos invita a reflexionar sobre la solidaridad intergeneracional, que, según las Naciones Unidas, es la "cohesión social entre generaciones".

Para la implementación de la Solidaridad Intergeneracional es indispensable alcanzar el desarrollo sostenible especialmente en países como el nuestro. Se plantea entonces por parte de las Naciones Unidas, una “…humanidad en su totalidad formando una comunidad intergeneracional en la que todos los miembros se respetan mutuamente y cuidan unos de otros, alcanzando así el objetivo común de la supervivencia de la especie humana”.

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La visión antropocentrista Descartiana, promovió la idea de que las cosas y seres de la naturaleza estaban a disposición de los seres humanos, y a partir de sus necesidades se da valor a los seres y minerales… de la naturaleza; esto ha contribuido a que nos sintamos propietarios del planeta disponiendo de ellos sin mayores limitaciones; a muy pocos se les pasa por su mente lo que ocurrirá en el futuro, disminuyendo la preocupación cuanto más lejanos estén lo acontecimientos

El respeto por el otro en ejercicio de la máxima “mis derechos llegan hasta donde comienzan los de los demás”; sería la fórmula mágica, que posibilitaría relaciones armónicas en la sociedad, la responsabilidad de nuestros actos comprendidos como una parte de un todo; a lo cual podemos llamar vida, no solo la de los humanos. La vida en la naturaleza, en todas sus formas merece respeto, sintiente y no sintiente; fauna, flora, minerales etc.  

El concepto del desarrollo sostenible, se manifiesta sobre la base de que “…la satisfacción de las necesidades de la generación presente no debe hacerse a costa de las generaciones venideras…”. La justicia como valor es imperiosa al momento de abordar un mundo mejor no solo para los actuales pasajeros del planeta, es menester tener en cuenta que “las cargas y beneficios entre las distintas generaciones” presentes y futuras.

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Ello nos lleva a la equidad intergeneracional, definida “…como el aspecto del desarrollo sostenible que se refiere, en la esfera del medio ambiente, a la equidad de la distribución intertemporal del patrimonio natural o de los derechos a su explotación”. Como se puede apreciar la justicia intergeneracional, entendido como un proceso “amplio que engloba, además de una dimensión distributiva, dimensiones de procedimiento, restauración y retribución”; una nueva forma de abordar los retos humanitarios.
Hay que compensar conscientemente la forma de consumir y disponer de manera justa por parte de la población actual para garantizar los recursos y la estabilidad vital de las generaciones futuras, manteniendo las condiciones vitales sostenibles.

El Secretario General de ONU, define “generaciones futuras” desde el planteamiento de problemas morales y meta éticos singulares, para los que las teorías morales y políticas convencionales son incapaces de ofrecer una respuesta adecuada.

La humanidad históricamente se ha preocupado y por consiguiente se solidariza con los seres cercanos, familia y amigos; no es común observar comportamientos solidarios frente al grueso de la sociedad y mucho menos con generaciones distantes, aún no nacidas. Lo anterior se evidencia en que solo los nacidos vivos somos titulares de derechos.

Esa visión individualista no ha llevado a un mundo de desigualdades, las cuales justificamos, en la mayoría de los casos desde posiciones cómodas. Es menester generar una cultura solidaria, que propendan por la sostenibilidad y la igualdad, la cuales se alcanzan a partir de un comportamiento solidario en el presente que seguramente sentará las bases para la estabilización del planeta y con ella la vida digna para las generaciones futuras.

Tarea: Darle un lugar en nuestra mente y acciones al valor de solidaridad.

Por Milton Armando Gómez Cardozo.

Docente Universitario y Servidor Público. Doctorando en Estudios Avanzados en DDHH, Magister en DDHH y Democratización, Especialista en Derecho Administrativo y Constitucional.

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